Tres conciertos recuperarán el festival Alamar, que se celebrará los días 24, 25 y 26 de junio

El folk rock de La Ambulancia Irlandesa, el folclore latino de Ana Carla Maza y el flamenco persa de Baramú protagonizan la cita de este año, que vuelve tras su ausencia por la pandemia el pasado año

Que queda mucho trabajo para vencer al completo a la pandemia del Covid es una realidad pero también lo es que, paso a paso y pequeño detalle a pequeño detalle, la normalidad se va abriendo camino. Pese a que la actividad ha sido constante desde finales del junio del pasado año, en lo que a la programación del Área de Cultura y Educación del Ayuntamiento de Almería se refiere se deja notar en la recuperación de ciclos fijados en el calendario y que el año pasado tuvieron que suspenderse. Como ya pasó con el ciclo de Música Sacra, con las Jornadas de Teatro del Siglo de Oro o pasará con el Festival de Flamenco, otro de los eventos que no se pudieron celebrar en 2020 retoma el pulso en este 2021, como es el caso del festival de músicas del mundo, Alamar.

Alamar vuelve a la ciudad de Almería con tres nuevos conciertos, todos ellos de entrada gratuita y aforo limitado a la situación sanitaria, que serán los días 24, 25 y 26 de junio, a las 21.00 horas, con el folk rock de La Ambulancia Irlandesa, los sonidos de folclore latino de Ana Carla Maza y el flamenco persa de Baramú. El primero de ello en el Anfiteatro de la Rambla, los dos siguientes en el Patio de los Naranjos.

El concejal de Cultura y Educación del Ayuntamiento de Almería, Diego Cruz, explica que “Alamar es el ciclo de conciertos que habitualmente representa la simbólica entrada al verano y simboliza el espíritu y carácter abierto de una ciudad mediterránea y abierta al mar como la nuestra. Es difundir la sonoridad de otras culturas, otros ambientes musicales y para nosotros es un placer volver a poder celebrarlo este año, aunque todavía con limitaciones, después de la necesaria suspensión de 2020”, concluye.

Sobre los artistas

La Ambulancia Irlandesa (24 de junio, Anfiteatro de la Rambla). Es un grupo de folk-fusión español. Fue fundado en Granada, Andalucía (España), en 1997 comenzando a interpretar música de estilo celta tradicional. Desde entonces ha evolucionando a un estilo más ecléctico, que reúne influencias que abarcan rock, blues, jazz, flamenco, country y funky, así como músicas tradicionales de todo el mundo, como Europa del este o el mundo árabe.

Ana Carla Maza (25 de junio, Patio de los Naranjos). Hija del famoso pianista chileno Carlos Maza y de la guitarrista cubana Mirza Sierra, la violonchelista Ana Carla Maza actuó en los escenarios por primera vez en la Havanna cuando apenas tenía diez años. Tras trasladarse a París para estudiar en el Conservatorio, reside actualmente en Barcelona desde donde desarrolla una carrera musical que le ha llevado a actuar en toda Europa en tiempo récord. En su primer álbum, Alma, publicado en 2018, la virtuosa violonchelista y cantante revisa delicadamente las tradiciones musicales de su infancia, desde la bolsa nueva brasileña hasta la habanera cubana pasando por el prisma de un vocabulario musical ampliado. Se presta libremente a ritmos latinos, melodías pop, armonías de jazz y técnicas clásicas para construir un universo musical impresionantemente vivo, habitado por una voz suave, pizzicati precisos y una técnica etérea. En 2020, Ana Carla Maza hace un paso más en su carrera publicado su segundo álbum en solitario, La Flor.

Baramú (26 de junio). El trío surge del encuentro de tres músicos de distinta procedencia geográfica; Irán, Extremadura y Andalucía, y de la intención de crear una música fruto de la fusión del Flamenco y la música Persa, con pinceladas hindú. Para ello Baramú se sirve de instrumentos tradicionales como el Tar, Barbat persa (Ud), Kamanche, Guitarra flamenca, Rabab, Bendir y Cajón, además del Cante flamenco y persa, para expresar y transmitir un mensaje renovador y fresco, repleto de color y gusto por la Vida. Un concierto de Baramú, que significa encuentro en lengua yoruba, es justo eso, un encuentro con la música, con uno mismo y con el mundo. Todo un viaje a diversos «lugares» donde seguir creciendo.