Paco Rivas sienta cátedra y ejerce de maestro en la primera sesión del ciclo ‘Guitarra en estado puro’

Es un apasionado de la guitarra y la expresa en diferentes estilos, ya sea jazz, blues, flamenco o rock. Se trata de Paco Rivas que anoche hizo disfrutar al público en el Museo de la Guitarra ‘Antonio de Torres’ en lo que fue la inauguración del ciclo ‘Guitarra en estado puro’, organizado por el Área de Cultura y Educación del Ayuntamiento de Almería, que tendrá el viernes 21 y el viernes 28 de octubre, a partir de las 20.30 horas, dos nuevas citas con el virtuosismo y la técnica de las seis cuerdas, con Santi Campillo y con Mercedes Luján, respectivamente, tal y como detalló en la bienvenida a los asistentes el concejal delegado del Área, Diego Cruz. Hay que recordar que las entradas para estos eventos son gratuitas hasta completar aforo, si bien se puede reservar asiento con anterioridad en http://almeriaculturaentradas.es.

Paco Rivas dio una auténtica lección con su guitarra ‘Gibson’ de 1963, y en la que, como resumen a los participantes en la master class, afirmó que “hay que tocar con el corazón”. En su caso, emoción y virtuosismo que le han llevado a colaborar con algunos de los más grandes artistas del panorama musical español e internacional, como Paquito D`Rivera, Paul Stocker, Lou Bennet, Enrique Morente, Jorge Pardo, Antonio Serrano, Jerry Gonzalez, Antonio Orozco, Javier Gurruchaga, Sergio Contreras, Txexo Bengoetxea, Antonio Carmona, Pasión Vega, David Bisbal, y un largo etcétera.

En su exposición, Paco Rivas abordó las siete escalas que tienen la misma digitación, que vienen a ser las formas más antiguas de la música occidental y que se denominan modos griegos, que son: dórico, jónico, frigia, lidio, mixolidio, aeolio y locrio. “Sobre esa base podemos construir infinidad de contenido, ya sea escalas sencillas, de acordes, puntear o hacer variaciones cromáticas, podemos enredar y a partir de ahí crear composiciones propias”, detalló para deleite de los asistentes, que disfrutaron cómo iba improvisando sobre las distintas escalas. “La frigia es la española por excelencia, la mixolidio es muy usada en el blues”, apuntó.

En el concierto posterior, Paco Rivas eligió de entrada dos composiciones de compás terciario, dos valses, y ambos interpretados casi por primera vez ante el público. El primero, dedicado a nieto Daniel de ocho años, el segundo una revisión de ‘Vals for Teddy’ de Bill Evans. Tras ellos, invitó a Diego Cruz a subir al escenario que, con su solvencia y estilo más que contrastado, interpretaría una abrumadora versión de ‘Midnight Sun’ y otra de ‘Wonderful World’. Como bis final, Paco y Diego recordaron los viejos tiempos del pub Georgia con ‘Georgia On My Mind’, que sirvió para terminar de levantar al público en una fervorosa ovación final.