Las obras en San Leonardo avanzan hacia su segunda fase y obligan a limitar el acceso a la calle Terriza a servidumbre y cocheras

Los trabajos alcanzan la intersección de ambas calles, una vez se han completado las canalizaciones y desvíos de servicios en el tramo comprendido entre Obispo Orberá y calle Terriza

Las obras de adecuación y mejora de la calle San Leonardo obligan desde esta semana al corte de tráfico de la calle Terriza, en su acceso desde la Avenida Federico García Lorca, permitiéndo solo el paso a cocheras y vehículos autorizados. De la misma manera queda limitada la circulación también en el tramo comprendido entre San Leonardo y Alcalde Muñoz con motivo de estas obras.

La concejala de Urbanismo e Infraestructuras, Ana Martínez Labella, ha pedido “disculpas” por los inconvenientes que puedan ocasionar estos cortes en el acceso a la zona como consecuencia de las obras, justificando su “necesidad” al haber alcanzado los trabajos que se realizan sobre la calle San Leonardo a “la intersección con la calle Terriza”.

Iniciada a finales del mes de junio, las obras sobre este vial, incluido dentro de los planes municipales para la ejecución del Plan de Movilidad Urbana, han cumplido su primera fase con la ejecución de las obras de canalización y desvíos de servicios en el tramo comprendido entre Rambla Obispo Orberá y calle Terriza. Respondiendo al cronograma de obras que se ha presentado para esta actuación, corresponde ahora seguir avanzando en la obra en la intersección de las calles San Leonardo y Terriza y continuar, en una tercera fase, con el resto de canalizaciones hasta la intersección con la calle Santos Zárate.

Martínez Labella ha recordado que esta actuación tiene por objetivo “mejorar de forma integral las condiciones de esta calle”, aumentando el espacio para los peatones y reduciendo el destinado a los vehículos “al mínimo imprescindible”, de forma que se permita el abastecimiento de los comercios de la zona y el acceso a los aparcamientos de las viviendas existentes.

Con una inversión de 250.000 euros y un plazo de ejecución de cuatro meses, la actuación forma parte del Plan de Movilidad Urbana, que prevé para esta vía su futura y completa peatonalización