La Hoya renace convertida en un gran jardín mediterráneo de 42.000 m² de superficie

Con una inversión de más de tres millones de euros, la actuación municipal plantea la recuperación paisajística y patrimonial del espacio comprendido entre la Muralla de Jayrán, La Alcazaba y San Cristóbal

El enclave de La Hoya se convertirá en poco más de año y medio en un gran jardín mediterráneo, recuperando para el disfrute ciudadano un espacio único, de 42.600 m² de superficie, en pleno centro histórico de Almería. Un paso prácticamente definitivo en ese objetivo se ha dado hoy con la aprobación, en Junta de Gobierno Local, del proyecto redactado por los arquitectos Vicente Manuel Morales Garoffolo y Juan Antonio Sánchez Muñoz, que cuenta con presupuesto base de licitación de 3.666.321,59, IVA incluido, y un plazo de ejecución de 14 meses.

Los autores del proyecto, ganadores del concurso de ideas convocado en 2010, han dado cuenta hoy del desarrollo de su iniciativa junto a la concejala de Urbanismo e Infraestructuras, Ana Martínez Labella, destacando la importancia que esta actuación tendrá “como parte del proceso de recuperación del Casco Histórico y de la puesta en valor de un enclave patrimonial y medioambiental de un valor excepcional”. Aprobado el proyecto, el siguiente paso será la licitación e inicio de las obras, señalando ambos hitos, de acuerdo con las previsiones municipales, “de forma inmediata el primero y a antes de final de año, el comienzo de los trabajos”

El espacio comprendido entre la Muralla de Jayrán, los cerros que encumbran La Alcazaba y San Cristóbal, se verá completamente transformado a través del proyecto bautizado bajo el nombre ‘Jardines Mediterráneos de La Hoya’. Se trata sin duda de la recuperación ambiental, paisajistica y patrimonial más importante que se haya acometido en la ciudad y que supondrá un antes y un después para la zona, además de la continuidad de las numerosas actuaciones desarrolladas y en ejecución actualmente sobre esta parte de la ciudad.

Martínez Labella ha felicitado el resultado del trabajo hoy expuesto, “abordado con el mimo, respeto y celo que un espacio tan singular como este se merece, con todos los condicionantes que la zona tiene”, señalando como claves de la propuesta “la rehabilitación del espacio, con una actuación global basada en el valor patrimonial y paisajístico del ámbito, la propuesta de intervención a nivel paisajístico, subrayada por el carácter singular del paisaje de Almería, mediterráneo y semiárido, propiciando un espacio patrimonial que, de forma individual y colectiva, los almerienses sientan como suyo.

La responsable municipal del área de Urbanismo ha destacado la “ilusión” con la que se aborda este proyecto, “anhelado por la ciudad desde hace varias corporaciones y que ahora, por fin, va a ver la luz dentro del compromiso asumido por un equipo de gobierno y por un alcalde, Ramón Fernández-Pacheco, que se ha fijado como prioridad absoluta la recuperación de nuestro Casco Histórico”.

Muy en detalle, los arquitectos autores del proyecto han diseccionado su obra planteada como una apuesta por una restauración paisajística con la vocación de ofrecer un espacio libre para el disfrute ciudadano, encontrando en la zona la mejor materia prima para el diseño de este espacio. Entienden los responsables del estudio KAUH arquitectura y paisajismo que “el proyecto está en el lugar, en los espacios, preexistencias materiales y testigos documentales que narran la evolución de este singular paisaje. La acción se fundamenta en desvelarlos”, ha explicado uno de los autores del proyecto, Juan Antonio Sánchez.

En su conjunto, la intervención, desde el máximo respeto al lugar y convirtiendo este en el leitmotiv del proyecto, pone a disposición de la ciudadanía un gran espacio unitario en el que poder descubrir y disfrutar de los elementos patrimoniales, vegetales y culturales, donde pasear, estar, contemplar, descansar, jugar, estudiar, aprender, atender a actividades pedagógicas, de ocio y culturales… en definitiva sentirse inspirado por el singular enclave y paisaje de la Hoya, un espacio que empieza a “revertirse” y que, mil años después, será objeto de la primera intervención pública.

Aspectos relevantes de esta actuación serán la restauración paisajística de las laderas de la Alcazaba y de San Cristóbal con especies vegetales autóctonas (matorral, arbustos y herbáceas, entre otros: arto negro, lentisco, algarrobo, palmito, esparto, jarilla, espino negro, mata conejera, arto blanco…) y la recuperación puntual de chumberas, como parte de la imagen cultural de La Alcazaba.

Con el proyecto vendrán a recuperarse también paratas, balates y el sistema de riego del antiguo cortijo que se ubicaba en la ladera de San Cristóbal, incluyendo la restauración y puesta en uso de la alberca alta y la alberca baja existentes, la creación de paseos, itinerarios y zonas estanciales, y la plantación de vegetación, incluidos árboles de tradición hortícola (cítricos, granados, higueras, azofaifos, morera, almendros, membrilleros…). El sistema principal del riego será tipo acequia, aunque se ha incluido una zona de parterres de cítricos con posibilidad de riego tradicional a manta.

Zonas estanciales

EL valle de la Hoya y sus taludes serán objeto también de una exhaustiva restauración paisajística incluyendo zonas de plantación, itinerarios peatonales, zonas estanciales y, en el centro del espacio e integrado en el conjunto de la composición, una explanada. Un espacio libre de mayor dimensión, sin plantación, que permitirá la celebración de actividades colectivas o disponer de un amplio espacio donde reunirse, correr, jugar en el día a día… La paleta vegetal compondrá una colección de especies vegetales características del clima termomediterráneo semiárido a modo de colección botánica, incluyendo en esta parte de la intervención la necesaria protección del subsuelo.

En Paseo de las Gacelas se convertirá el camino estructurante que conectará con el acceso a la Finca Experimental de la Hoya, intervención a los pies de la Torre del Saliente, en La Alcazaba, conectando con el nuevo recorrido que une las calles Pósito y Almanzor, incluyendo un balcón-mirador desde el que se podrá observar todo el valle, con punto de información, zonas estanciales y zonas de plantación.

La apuesta por la intervención paisajística se recoge en los más de 25.000 m2 de zona de plantación y restauración medioambiental, superficie que albergará más de un centenar de especies diferentes, con predominio de especies autóctonas, con bajas necesidades hídricas y con resistencia a la sequía, caraterísticas del clima termomediterráneo o semiárido; 21.048 unidades de plantas (incluidos herbáceas, arbustos y árboles), y 122 árboles, en su caso de catorce especies diferentes.

La cultura del agua, como patrimonio de Almería, se convierte en otros de los motivos principales de este espacio según recoge el proyecto. Con su frescor y sonoridad atraerá a avifauna, mariposas y especies polinizadoras. Seguir y descubrir la red de agua y descansar en las zonas estanciales asociadas a esta será otro de los recorridos principales de este espacio.

Jardines Mediterráneos de La Hoya contarán con pavimiento de terrizo estabilizado con cal, en una superficie que rondará casi los 9.000 m², y pequeño adoquín irregular de piedra caliza, en una superficie aproximada de 1.200 m². La actuación, de acuerdo al proyecto hoy aprobado, vendrá a completarse con una red de alumbrado adecuada al entorno (262 unidades de balizas bajas) y la dotación de mobiliario, como bancos (63) y papeleras (22), además de la necesaria señalización de lugares, elementos y especies vegetales de interés